1. Por Lealtades inconscientemente (lo transgeneracional):
Mi clan espera que viva la vida de pareja de una cierta manera. Cuando no la vivimos así, nos sentimos culpables o no pertenecientes.
Además, tendemos a elegir lo conocido, a sentirnos atraídos a personas con las que establecemos dinámicas repetitivas, que ya hemos visto en nuestra familia.
Pregunta de reflexión: los valores que aprendí, ¿les dieron fluidez a mis padres? ¿tienen legitimidad, congruencia con el presente? ¿Como vamos a hacer para construir unos valores NUESTROS? ¿Qué quiero conservar de lo que quiero cambiar?
2. Por nuestra herida de la infancia: Escogemos a la pareja,
Pregunta de reflexión: ¿Cómo veo, reconozco y valido yo misma mi herida? ¿Cómo me rescato, como adulta, del dolor?
3. Por llenar los vacíos de los padres/clan. Esto puede darse cuando,
Entonces escojo a la pareja para que llene el anhelo de mamá y papá. Son parejas que tienden a tener una convivencia como de hermanos (generalmente con poca o nula sexualidad)
Pregunta de reflexión: ¿Qué es lo que yo le estoy regalando al sistema con esta escogencia?
4. Por colusión
La colusión se origina por la necesidad afectiva no satisfecha durante nuestra infancia. Mientras estoy en colusión, digo que quiero algo pero hago cosas inconscientes para que no lo haga. Esa tensión permanente, genera un acercamiento intenso, pero nunca una verdadera intimidad.
Pregunta de reflexión: ¿cuáles son las semejanzas y diferencias encuentro entre mi pareja y mis padres?
La entrada ¿Por qué es difícil el amor? apareció primero en Tu Sexo Sentido.]]>Las máscaras son estrategias de sobrevivencia infantiles que resultan desadaptativas en adultez porque ocultan nuestro ser auténtico. Hay tres máscaras principales. Todos nos manifestamos a través de las tres, pero una es la más fuerte.
Y ahora, ¿Que puedo hacer?
“Todo este preámbulo para contarles que voy a estar escribiendo nuevamente y que eso me llena de alegría e ilusión. También intentaré ponerme al día y contestar todas las preguntas que me envían”
Ana Salgado. Abril 2018Esto fue lo último que supieron de mí. Fue el 8 de abril de 2018. Ya sé que parezco novio de los que se desaparecen y vuelven a aparecer con todo tipo de excusas baratas e inverosímiles para justificar su ausencia, pero les juro que es cierto.
10 días después de ese artículo mi querido país, Nicaragua, estalló en llamas políticamente en su peor crisis política en 30 años. Después de +300 muertos, centenares de heridos, desaparecidos, torturados, presos políticos y una opresión contra cualquier expresión de disidencia u oposición, pocas veces vista en nuestro hemisferio en años recientes, he terminado oficialmente de refugiada política en Estados Unidos con mi familia. Aquí un resumen de lo ocurrido (nada sexy, lo siento)
Todo este preámbulo para contarles que voy a estar escribiendo nuevamente y que eso me llena de alegría e ilusión. También intentaré ponerme al día y contestar todas las preguntas que me envían (dejavú, lo sé)
Y para que vean que esta vez sí es diferente y que mis intenciones son serias, los vengo a invitar a conocernos personalmente (YAY!) en un taller online sobre el tema que nos converge. Tenía bastante tiempo de querer volver a impartir talleres de sexualidad y por fin me he regalado el tiempo para compartir con todos Uds. este espacio de descubrimiento y sanación.
10% de descuento por inscribirse antes del 30 de Octubre
Toda la información y las opciones de inscripción y formas de pago las encuentra haciendo clic aquí
¡Los espero el próximo sábado!
Con cariño,
Ana
La entrada Taller online «Amor, Eros y Sexualidad» apareció primero en Tu Sexo Sentido.]]>Muchas blogueras, cuando se van a ir o dejar de escribir por alguna razón, avisan. Lo siento por no avisar. La verdad es que el torbellino de la maternidad me agarró de sorpresa a mi también.
En éste tiempo he tenido 3 embarazos y he parido 2 niñas que han ocupado cada pequeño rincón de mi vida y succionado hasta el último instante de tiempo y, en general, he estado enfocada en mi labor de esposa y mamá.
El trabajo ha pasado a un segundo plano y ahora trabajo solo medio tiempo.
Luna, mi hija mayor, ya tiene 3 años y va ha empezado a ir al colegio. Maia, la menor, ya tiene 7 meses. Y ya no abran más hijos. Esa etapa está cerrada. Y de pronto me ha hecho falta mi primer hijo, éste blog y todos sus lectores.
Tengo tanto nuevo que compartir con ustedes. En medio del torbellino, terminé una formación de casi 3 años en Constelaciones Familiares. Una mirada nueva e innovadora con respecto a las relaciones entre seres humanos y que ha probado ser invaluable en el trabajo terapéutico y de sanación.
Al ser una mirada nueva y más amplia, complementa y nutre el enfoque de la mayoría de los temas que se han tocado en éste blog. Y la verdad es que tengo muchas ganas de compartirla con ustedes.
Todo este preámbulo para contarles que voy a estar escribiendo nuevamente y que eso me llena de alegría e ilusión. También intentaré ponerme al día y contestar todas las preguntas que me envían.
Con cariño,
Ana
Esta fantasía en la que vivo la mayor parte del tiempo se estrella de cuando en cuando con la realidad cada vez que llega un padre y/o madre de familia a consulta por tener un hij@ homosexual.
Generalmente vienen además, en medio de la crisis, con una enorme cantidad de sufrimiento y confusión con dos objetivos:
1. Aclarar porque les ha pasado esto a ellos, a su hijo, a su familia. Todo esto en tono de tragedia
2. Si yo puedo solucionar el problema. Siendo el problema que su hijo es homosexual.
El primer punto se soluciona con un poco de aceptación y perspectiva. Finalmente la homosexualidad no es ninguna tragedia en el sentido biológico. Es decir, que la naturaleza no lo considera un defecto. La homosexualidad se encuentra en todo el reino animal con la misma prevalencia que en los humanos (entre el 5 y el 10% de la pobleción) con la diferencia que los gusanos, los elefantes, los gatos y los zopilotes comprenden (a veces mejor que nosotros) que es natural y no le ponen la carga social que nosotros le ponemos y por tanto la mamá elefanta no sufre como tragedia el que su hijo le gusten otros de su mismo sexo.
Si se vive como tragedia, se vuelve tragedia. Especialmente porque el hijo siente el rechazo de los padres pero no puede hacer nada por cambiar lo que ES.
El segundo punto se aclara entendiendo que la homosexualidad no es una enfermedad y por tanto no se puede prevenir, curar ni puede tratarse. Tampoco es «culpa» de los padres ni de las circunstancias. Homosexual (así como mujer, hombre, moreno o chele, colocho o chirizo), se nace. Las últimas investigaciones científicas lo han logrado comprobar.
La entrada Tener un hijo gay apareció primero en Tu Sexo Sentido.]]>Este sinsentido interfiere mucho en que las personas consigan lo que quieren. La persona que pidió no se permite recibir porque el que da, según su percepción, no QUIERE (muere por) dar. La persona que va a dar, que quiera o no ya se decidió a dar, es rechazado y además, hecho sentir culpable y muy probablemente involucrado en una pelea.
Todo esto surge de algunas creencias incorrectas:
Para poder evitar los sinsabores y las insatisfacciones que genera esta actitud, hemos de:
Es una ingratitud no aceptar un gesto sólo porque percibimos que la otra persona no quiere hacerlo.
Aplicando estas recomendaciones, podemos relajarnos y aprender a recibir lo que nos dan con más gusto.
La entrada Quiero que quiera apareció primero en Tu Sexo Sentido.]]>Si te quedás como “la otra”:
Entonces está bien. Sin embargo, si yo digo que quiero una relación estable, libre, una familia feliz pero sólo establezco relaciones con hombres comprometidos, me alejo de lo que digo que quiero, y es ahí donde el balance entre el sufrimiento y el placer que me causa la relación se vuelve negativo.
Si la relación se “oficializa”:
Sí y sólo sí yo estoy dispuesta a asumir estas consecuencias sin quejarme, feliz con lo que la naturaleza de la relación incluye (emociones fuertes, compañía) y sin quejarme por lo que no incluye (prioridad, fidelidad, legitimidad), entonces es una opción válida para mí. Si no, entonces he de buscar otra opción.
La entrada Consecuencias de ser la otra apareció primero en Tu Sexo Sentido.]]>El problema no tiene remedio: Hay cosas que no tienen remedio, contrario a lo que nos pretenden vender. No
tiene remedio todo lo que es una malformación física, mental o emocional que viene de raíz, en éste sentido la famosa frase que dice que “árbol que nace torcido, nunca su tronco endereza” es correcta. Si es un infiel en cadena, un mentiroso compulsivo, un sociópata (sin valores ni límites cívicos y/o morales) y demás patologías personales, el querer dar una segunda oportunidad es una lucha sin sentido, perdida desde el inicio.
Muchos prometen cambiar antes de haber siquiera iniciado el proceso. Tiene mucho sentido pedir alguna muestra significativa de cambio real y sostenido por un tiempo razonable antes de pensar en dar una segunda oportunidad basada sólo en promesas vacías.
Obviamente, también hay factores personales, pero de esos hablo en una próxima ocasión.
La entrada Dar otra oportunidad a mi relación (parte 1) apareció primero en Tu Sexo Sentido.]]>Esto parece contra intuitivo, porque lo que se promueve es buscar la felicidad instantánea en hacer lo que queremos en el momento, sin pensar en nada ni en nadie, y esto nunca nos hace una mejor persona. Por eso no hablo de instantes de euforia, sino de felicidad verdadera y duradera.
Las personas que están siempre en busca de ser mejores son más felices porque su vida está llena de significado, saben lo que quieren, hacen lo que tienen que hacer para conseguirlo y por tanto sus deseos se cumplen. Cuando hablo de deseos, me refiero a deseos internos, no externos (por más buena persona que sea no puedo cambiar a otros ni las cosas que pasan, sólo como yo reacciono ante ellas).
Por el contrario, las personas que están empecinadas en vivir la vida sin pensar, sólo buscando el siguiente instante de felicidad, terminan con vidas sin sentido, vacías, viven llenas de miedo, ansiedad e insatisfacción. No es que no tengan instantes de felicidad, pero no lo logran sostener, la felicidad se escapa fácilmente.
Como están enfocados sólo en la felicidad inmediata, hacen cosas incorrectas. Siguiendo sus impulsos, se involucran en actividades que las que se causan daño a ellos y/o a otros.
Para dejar de hacer esto necesito entender dos conceptos:
1. Satisfacción propia: Todos estamos siempre haciendo cosas por nuestra propia satisfacción. Consiente o inconscientemente. Sin detenernos porque es ilimitada. Se manifiesta como tendencias personales. Así, lo que hacemos por satisfacción propia es mala conducta.
2. La recta conducta: Se opone a la mala conducta. Consiste en esforzarnos de manera constante por dar lo mejor de nosotros mismos con una buena motivación. Todo lo que surge de ella es positivo. Para cultivarla necesitamos:
Hay dos maneras de practicar la recta conducta:
1. Evitar tentaciones: para no caer en ellas.
2. Desenfocarme de lo externo: querer cambiar lo externo, nos descontrola internamente.
3. Cortar la atención inapropiada: que incrementa las cualidades positivas o negativas de los objetos/personas.
Para esto puedo:
Esto no nos sale natural. Lo natural es todo lo contrario. Por eso requiere estar dispuesto a hacer esfuerzo constante.
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La entrada ¿Cómo ser mejor persona? apareció primero en Tu Sexo Sentido.]]>El factor que más afecta esta promoción, son una serie de mitos que han surgido con respecto al mismo. Entre los más comunes están:
El condón disminuye la sensibilidad: Si le preguntamos a los científicos que han medido y estudiado el asunto, la respuesta NO, que unos cuantos milímetros de látex no hacen la diferencia en cuanto a las sensaciones que puede experimentar un hombre durante el acto sexual.
Dicho esto, y como la sexualidad es al final una vivencia personal, la cantidad de incomodidad que un hombre pueda sentir al usar un condón durante la relación sexual tiene que ver:
Usar doble condón protege el doble: La respuesta sencilla es NO. El roce de látex con látex incrementa las posibilidades de que el condón se rompa. Un condón puesto de manera correcta y a tiempo (desde el inicio de la penetración, no hasta que se va a eyacular) es la manera más efectiva de protegerse.
El condón es para el sexo casual, no para usar con mi pareja: muchas parejas deciden usar el condón como método anticonceptivo porque no provoca alteraciones hormonales como algunas pastillas anticonceptivas, no es invasivo ni permanente como la vasectomía o la ligadura de trompas de Falopio y además, es barato y práctico.
La entrada Mitos sobre la sexualidad masculina: el condón apareció primero en Tu Sexo Sentido.]]>